Muchas veces me veo agobiada por todo lo que me rodea, la mayor parte de las veces minucias sin importancia, otras con más razón pero al fin y al cabo, por fortuna, nada que no tenga solución. Serán cosas de la edad y no me avergüenzo de admitirlo, porqué no, falta de madurez.
Pero en lo que respecta a la enfermedad soy todo lo contrario, lo cual me sorprende incluso a mi misma y eso, ¿por qué? Porque dentro de mi tengo un profundo convencimiento de que todo va a ir bien. Por eso, muchas veces pienso que esta enfermedad me está enseñando muchas cosas. Por supuesto que sí podríamos elegir a todos nos gustaría “estar como un robles” pero es algo que nos ha tocado, nada más y nada menos que la lotería de la vida.
Y entonces, ¿qué puedo decir que me está enseñando la esclerosis múltiple? Parece mentira, pero sí, me ha enseñado un montón de cosas y no soy ni mejor ni peor, pero lo que está claro es que ya no soy la misma. Lo sé…
He aprendido a valorar los momentos en los que estoy bien. Antes estar bien era algo que daba por hecho, ahora en cambio para estar bien “hay que currarselo un poco más” porque no te va a venir solo. Si te excedes, lo pagas y por supuesto, si no haces cosas que te beneficien, ni que decir tiene.
Me emociona poder hacer pequeñas cosas que durante algún tiempo no he podido hacer, como subir unas escaleras e ir andando a los sitios. Me estoy volviendo “una andarina” en toda regla, creo que estoy andando más que nunca. Desde que deje a un lado la muleta, me prometí a mi misma que tenía que aprovechar al máximo mis piernas.
Valoro más a la gente que está a mi lado y me muestra su apoyo incondicional, aquella con la que puedes mostrarte tal cual eres y hablar abiertamente sin que te juzguen, sin miedo a lo que piensen, a ser ni más ni menos que transparente, TÚ.
Intento encauzar mi vida hacia lo que creo que me va a venir bien tanto ahora como en el futuro. Eso de ir dando palos de ciego sin un objetivo lo he estado haciendo durante mucho tiempo y ya no va conmigo. Quiero hacer cosas que aporten calidad a mi vida.
Por eso, puedo decir que aunque no poco a poco estoy aprendiendo a vivir de forma diferente, cambiando los patrones a los que estaba acostumbrada. Tener todo bajo control ya no se puede, lo voy asumiento costosamente…¿De qué vale hacer planes a largo plazo, si realmente luego las cosas nunca vienen como esperabas?
La incertidumbre es algo contra lo que no podemos luchar y por mucho que nos empeñemos lo que tenga que venir, vendrá. Por eso, mejor tratar de aprovechar cada momento, estar “a gustito” y disfrutar de cada cosa. Suena a tópico, pero es así, no hay mayor felicidad…Y siempre pienso que algún día, todo ese esfuerzo que hacemos, que sólo nosotros mismos sabemos, tendrá su recompensa.
Petita!!, gente como tú son las que necesita este mundo, gente luchadora, optimista ( aunque, a veces el desánimo os desborde), eso también es humano y tenéis derecho a él.
Un !!Hurra!! Por tí y por to@s l@s que compatís vuestra enfermedad. Es un gesto de valentía.
Contar, libera.
Compartir en cierta forma sana.
Gracias por tu ejemplo.
Ejemplo a seguir.
Te queremos, te apoyamos y estamos contigo
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Hola Ana,
Muchísimas gracias por tus palabras, me emocionan un montón. Sólo soy una más y contar por supuesto me ayuda un montón a liberar lo que tengo dentro. Con gente como tú que nos apoya y que la sentimos a nuestro lado se convierte en una gran satisfacción. Y sé que además lo decís de corazón y por supuesto que el sentimiento es recíproco.
¡Qué haríamos sin vosotros! Un abrazo cargado de cariño
Gracias, muchas gracias
¡Mil gracias a ti por leerme!
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Aupa Petita
yo no te conozco pero también te quiero.
Tienes que ser alguien MUY GRANDE para escribir así
Mira quién lo dijo, el maestro de la escritura.
Siento una gran admiración al leer tus relatos, así que para hablar de grandeza sólo tienes que mirarte a ti mismo ☺
Un abrazo muy fuerte.
Este comentario va destinado a los tres bloggers: Pepita21, Keawe e Itzi.
Os explico que ésta es la primera vez en mi vida que sigo un blog. Empecé a hacerlo porque uno de vosotros es de mi familia, pero ya que leía a uno pues leía a los demás.
Me parece admirable lo que estais haciendo, contar vuestra visión y vuestras vivencias, no solo ayuda a otras personas con EM, ayuda a todo el mundo.
Me iba a enrollar más pero todo lo que iba a poner se resume en una palabra.
GRACIAS.
Seguid asi, sois buenos para el alma.
Muchas de nadas, Chocolate.
También nos ayudamos a nosotros escribiendolo
Hasta pronto!
Gracias por la parte que me toca Chocolate ¡Qué ilusión hace leer tu mensaje cargado de tanto cariño! Me siento muy agradecida por las palabras que nos dedicáis y me encanta leer a mis compis de batalla, ver cómo transmiten y cuánto me llegan sus palabras, aunque no les conozca, les siento muy cerca.
Gracias a vosotros de corazón.
Un fuerte abrazo.